Decisiones - Capítulo 8

Buenas noches/madrugadas/días Bauler@s!

Antes del post tengo algo que decir... Que buen papel están haciendo las selecciones latinoamericanas en el mundial, ah y felicitaciones a España que lograron su primera victoria. Fin del comentario off topic de hoy XD

En fin, para quienes esperaban con ansias la continuación de esta excelente historia. Espero que la disfruten.

Autor: Eldest88

Capítulo 8

Llegamos a una casa bastante amplia, quedaba en una esquina de un barrio al norte de la ciudad, era de dos pisos, puertas y ventanas en caoba, al entrar a la sala lo primero que vi fue un cuadro gigantesco encima de la chimenea con una cita bíblica. 

-Si hasta se me estaba olvidando que los padres de Ximena dirigían una iglesia.-Pensé. 

-Bienvenida Andrea…..mi hija me ha hablado mucho de ti estas últimas semanas.- Por poco se me sale el jugo que tenía en la boca, me lo trague a la fuerza. 

-Mama……-La castaña la miro recriminándola por la frase. 

-Bueno será mejor que subamos ya a mi cuarto…se nos hace tarde.- La agarro de la mano y arrastras la subió por la escalera, al llegar al segundo piso Andrea pudo vislumbrar varios cuartos, al llegar al segundo en medio del pasillo, Ximena empujo la puerta dejándola ver una habitación grande y cómoda, en ella veía un pequeño sofá al lado de la ventana al fondo, una cama en la que cabrían al menos tres personas al lado derecho……y…. se quedo en eso, pues fue lo que más la dejo en shock, la cama. Hasta el momento no había pensado en el hecho de que estaría sola con esa chica, se quedo pasmada en la entrada no sabiendo escoger entre entrar y arriesgarse o salir corriendo y alegar un terrible dolor de estomago, pero para su mala suerte Ximena no la dejo meditar demasiado.

-Eh…te vas a quedar allí?....ven acomódate en donde quieras, tenemos mucho que estudiar.-La jalo del brazo y cerró la puerta detrás de ella. 

-Ok…omg…-Decidió sentarse lo más alejada posible de ese artefacto de maldad mal llamado cama, en el pequeño pero acogedor sofá. 

-bien espérame un momento mientras me cambio.-La chica le dio la espalda y acercándose al armario que se encontraba al lado contrario de la cama, empezó a desvestirse delante de ella. 

O_O

Andrea prácticamente estaba en shock, sintió como la sangre lentamente se apoderaba de su cabeza. 

Primero se quito el chaleco azul, tirándolo a un lado, luego lo siguió la corbata roja. 

Pero justo en el preciso momento en que sus manos sostenían el último botón cerrado de su camisa blanca….se quedo quieta, segundos después volvió a abotonarla, cogió la ropa que tenia lista para ponerse y salió disparada fuera de la habitación. 

-Dios.....que fue eso, como se te ocurre hacer eso-La castaña se repetía mirándose al espejo del baño. 

-Tonta, estará pensando que me le ofrecía- Se termino de cambiar, pero antes de salir respiro profundamente tratando de calmar su pulso, que estaba a mil. 

-Uffff….-Andrea volvió a respirar, hasta ese momento se había parado su sistema completo, por poco cae desmayada, se acerco al espejo del armario, en el reflejo se veía más roja que un tomate, y una línea angosta de sangre salía por su nariz, saco un pañuelo y se la limpió. 

-Por que me pasan estas cosas a mi.- se dijo tocándose con la mano la cabeza. 

-No más….es la novia de tu mejor amigo……lo entiendes? –Le recriminaba a su reflejo. 

Sacó su guitarra y se dispuso a afinarla, momentos después la castaña volvía a entrar con un leve rubor en sus mejillas. 

-Ok, comenzamos?.....-Acerco la silla del escritorio y la acomodo enfrente de la ojiazul quien sentía de nuevo como se incendiaba su cara. 

Andrea se había colocado una camiseta corta de color verde ceñida a su cuerpo, unos jeans negros que dejaban ver una cadera que por el uniforme nunca nadie habría adivinado que tendría y unas convers del mismo color del pantalón. 

-Tengo..... salir de aquí, tengo que salir…….no puedo controlarme……es demasiado- La pelinegra tenia desencajada la mandíbula y sin disimulo miraba a Ximena de arriba abajo con ojos de lobo queriendo comerse al la ovejita que tontamente le sonreía. 

Se alerto al ver que alguien abría la puerta y entraba, era la madre de la castaña. 

-Disculpen chicas- se acerco a Ximena y le dijo. 

-Hija, me llamaron de urgencia de la congregación, tengo que salir, regresare en la noche junto a tu padre, así que compórtate…- Le dio un beso en la frente y se despidió de la morena dejándolas solas en el cuarto y lo peor en la casa. 

-Me permites el baño…- la ojiazul se levanto como resorte y a penas la castaña le indico como llegar salió deprisa del lugar. Al llegar al baño cerro con llave se miro en el espejo, abrió la llave del lavamanos llenándose las manos con agua y empezó a echársela burdamente en la cara, mojando parte del uniforme. 

-Es un sueño….es un sueño….maldita sea, despierta-una y otra vez se echaba el agua pero nada aun se veía de pie en ese baño, no teniendo más que darse por vencida, se limpio y salió. 

-No imagine que mi madre nos dejaría solas....esto fue una mala idea.-Ximena se pasaba la mano por la frente en señal de preocupación. Al rato Andrea entro de nuevo en la habitación. 

-Ok, con cual empezamos.-saco fuerzas de no sé donde para controlarse y lo logro volviendo a su estado original de tranquilidad. 

-Estas bien?...pareces un poco pálida.-Acoto la castaña. 

-seee….no te preocupes no es nada, más bien comencemos- tomo su guitarra y se la colgó al hombro, afortunadamente había un amplificador por lo que pudo tocar sin problema. 

Ensayaron por más de una hora seguida, la pelinegra pidió una pausa realmente estaba agotada. 

-Sabes que, tengo hambre.-le dijo sentándose en el sofá. 

-Si, tienes razón, ya esta siendo hora de comer alguito......-La castaña se coloco en pie -voy a preparar unos sandwichs, esperame. 

-Dejame ayudarte.....-Andrea la siguió por las escaleras hacia la cocina. 

Entro a un espacio grande con paredes blancas, en el centro había una mesa pequeña, y al lado izquierdo se encontraba la estufa y varios muebles de madera. 

-Bastante bonita, se nota el gusto de tu madre....-le decía la ojiazul. 

-Gracias, ella adora esta cocina.- Saco una bolsa de pan del estante arriba de su cabeza.-Mira en la nevera si hay queso y jamón.-le señalo al lado de la puerta por donde habían entrado. 

-Ok-Abrió la puerta grande y busco con la mirada, luego saco lo que necesitaban y se los paso a la castaña. 

Ximena preparo todo y lo coloco en platos, Andrea le ayudo a llevar las sodas. Ya en el cuarto se dedicaron a comer. 

-Yo quería preguntarte algo.-Ximena la miro directamente a los ojos. 

-Si?. 

-Por que, desde que nos conocimos has sido tan distante conmigo. 

-Bueno, seré sincera, no me caíste bien desde el principio.-tomo un sorbo de la soda. 

-Wow, que delicada. 

-Te dije que seria sincera.-Sonrío por el comentario. 

-Si, pues para que lo sepas tu tampoco me caíste bien.-Termino de comer y se sentó en el borde de la cama. 

-La verdad, me entere hace mucho.-sus ojos azules mostraban un aire divertido. 

-Tonta...-la castaña tomo un cojín y se lanzo, pero esta en un acto reflejo lo esquivo. 

-Mira que buscarte problemas.....-la pelinegra lo recogió del suelo, se levanto y se acerco lo suficiente para asestarle un golpe al costado. 

-Ups...-miraba el rostro de la castaña con la boca abierta por la sorpresa. 

-No pensé que me fueras a pegar tan duro....-En un dos por tres agarro otro cojín y se lo estampo a la ojiazul en la cara. 

-Ok, esto es la guerra 

Cada una se daba golpes con los cojines a diestra y siniestra, ambas sonreían, y corrían tratando de esquivar las almohadas. Ximena se sentía algo extraña, su corazón palpitaba a mil, pero no era por el esfuerzo, era por algo más, pero ella no podía entenderlo. Andrea estaba fascinada con el juego, jamás había estado así con una chica, solo jugando, siempre era sexo y nada más, sentía una rara conexión con ella, algo que jamás había experimentado. 

Cansadas se sentaron en el suelo al lado de la cama, una al pie de la otra. 

-De donde te apagas....-La pelinegra hablaba agitada. 

-Que quieres decir?.....lo que pasa es que yo hago más ejercicio que tu.....si te he visto como te saltas deportes....floja-Ximena giro la cabeza para mirarla, Andrea también lo hizo y se quedaron mirando a los ojos. 

-No me había dado cuenta que tus ojos son verdes....-la ojiazul le decía con la mirada sostenida. 

-Son oliva, la gente a veces cree que son negros.-la castaña aun tenia la respiración agitada. 

-Ah si yo había , creído eso también...pero -levanto la mano y le quitó un mechón de su frente -ahora que lo veo más detenidamente te ves linda con esa combinación, tu cabello y tus ojos, realmente te hacen hermosa. 

Ximena no sabia que estaba pasando, no podía dejar de mirar esos ojos azules, aunque ya se había sentado, escuchaba la velocidad con la que aumentaban sus pálpitos. Poco a poco Andrea se iba acercando al rostro de la ojiverde, aun tenia su mano en la mejilla de esta.

Ximena solo quería alejarse pero algo no se lo permitía, sabia que lo que vendría a continuación no estaba bien, pero sentía unas ganas enormes de que sucediera. Una vocesita le repetía que no lo hiciera que era la novia de su mejor amigo, sin embargo se iba apagando por el sonido de su corazón agitado que le pedía a gritos que la besara. 

TOC,TOC 

Asustadas se colocaron rápido en pie y se quedaron mirando hacia la puerta como un par de bobas. Esta se abrió. 

-Chicas ya llegamos, bajen a cenar.....-Era su madre, volvió a salir. 

-Yo...este.....mmm- la pelinegra no sabia que decir, si disculparse por lo que iba a hacer o simplemente no recordarlo. Opto por lo segundo. 

-Será mejor que me vaya ya esta tarde -metió la guitarra en el forro, agarro su mochila, salio y bajo por las escaleras muy a prisa. Al llegar a la sala encontró a los padres de la ojiverde. 

-Buenas noches, disculpen pero ya me tengo que ir esta un poco tarde 

-Y no cenaras con nosotros?-La señora le preguntaba. 

-No puedo, mis padres se molestaran si me tardo más de la cuenta.-se despidió y salio como alma que lleva el diablo. 

Ximena no supo que hacer, se había quedado estática pensando en lo sucedido, camino como zombie hacia el comedor en donde la esperaban sus padres. 

-Tu amiga no se quiso quedar a cenar, claro que tenia razón si esta como tarde.-su madre le decía mientras observaba el reloj en su muñeca. 

-Aja....-la chica no salia de su ensimismamiento. Ceno sin ganas y luego se encerró en su habitación. 

-Que estoy haciendo....-Recostada en la puerta mirando al suelo, levanto la mano para tocar sus labios. 

-No la pregunta importante es, que estas sintiendo?-su conciencia le interrogaba, haciendo que sus ojos verdes se llenaran de lágrimas. 

-Ahora.....que?-Andrea había llegado a la estación del autobús, sin embargo no lo abordo a su llegada, simplemente se quedo allí de pie sin saber que hacer. Se sentía confundida, lo que estuvo a punto de pasar con la castaña estaba mal, pero algo en su interior le decía que volviera y que lo terminara. 

-No, lo que tengo que hacer es alejarme de ella-unas cuantas gotas cayeron, espero un taxi y lo abordo, pero no iba su casa, ¿quien podría ayudarla?, ella misma sabia la respuesta y hacia ya se dirigió. 

continuara......