Decisiones - Capítulo 20

Hola Bauler@s!

No, no están soñando, esta es una actualización de Akari :P

Causas ajenas a mi voluntad hicieron que me ausentara mucho tiempo y luego seguí ausente porque necesitaba despejar un poco. Recién ayer regresé a casa, mi hija canina y yo disfrutamos de unas merecidas vacaciones. 


Aunque el mes que viene volveré a estar ocupada, trataré de actualizar en la medida de lo posible; por ahí tengo un material que he estado preparando y en el mail me encontré varias colaboraciones que revisaré pronto, ofrezco disculpas por la demora también está pendiente una renovación, hay que darle vida al Baulito nuevamente ^^

Ahora si, les dejo con la continuación de uno de los fanfictions más esperados por la fanaticada ;)

Capítulo 20: “Tentaciones”

Autora: Eldest88
N/A: Disculpen la demora, pero el tiempo se me ha hecho algo complicado, espero que les guste la continuación n___n 

  

-Mamá más tarde quedé de verme con Alex -la castaña recién llegaba de su ejercicio matutino, que ahora por aumento de energía se había ido multiplicando.

-Imagino que ya ordenaste tu cuarto, últimamente estas muy desordenada- los ojos cafés de su madre la miraban con reproche desde el sofá.

-Ummm……se llama adolescencia madre-la miro desde los escalones sonriente para luego subir a cambiarse.

Pasadas unas horas se encontraba lista, no sabía a ciencia cierta pero ese día en especial se sentía algo intranquila, con el transcurrir de las semanas los sueños con la pelirroja habían aumentado de tono, mil veces imaginaba como la poseía en diferentes lugares, y eso lo atribuía al reciente distanciamiento de la pelinegra, ella misma había tenido más actividades de las normales, bien fuera en la iglesia o en el colegio, igual que su chica, quien por azares del destino nunca se encontraba cuando ella si tenía el tiempo para hablarle.

-Peque….¿en qué planeta andas? -la pelirroja llevaba varios minutos desde su llegada tratando de llamar la atención de la ojiverde.

-Lo siento solo pensaba en algo-sonriente se levanto de su lugar en una banca en el parque de diversiones en el cual habían quedado de verse, para luego darle un beso en la mejilla, que al contacto resulto en un pequeño sonrojo para ambas.

-Ven mejor vamos a la montaña rusa-la castaña la tomo de la mano entrelazándolas inconscientemente.

o.O.o

-Andre…..Andre -la castaña sacudía suavemente a la pelinegra para q se despertara.

-¿Mmmm?........-esta se removía mientras sentía algo suave su cama –rayos……..me mata la cabeza-al abrir sus ojos sintió el terrible impacto que le producía la luz de la mañana.

-Tómate esto-la mujer le ofreció un vaso de agua con una par de aspirinas, que al instante desaparecieron en la boca seca de la ojiazul, pasados unos segundos en los cuales logro enfocar su entorno no reconoció el lugar donde se hallaba.

-Este no es mi cuarto-se masajeo los ojos en un intento de recordar la noche anterior.

-Tranquila…..bebiste demasiado, no creo que logres acordarte-esa voz de pronto se le hizo muy conocida, no quería abrir los ojos, pero debía comprobar sus sospechas.

-Camila……..tu……..tu-la cara de Andrea se volvió del color de una hoja de papel, miles de preguntas empezaron a bombardearle la cabeza haciendo que le doliera al instante.

-¿En serio no recuerdas como llegaste acá?- los ojos miel la observaban extrañada. 

o.O.o

-Mmmmm……-la pelirroja llevaba poco más de dos minutos pensativa.

-Parece que la cocina no se teda mucho-la ojiverde la miraba divertida, desde hace un buen rato le había pedido a su amiga que cortara en julianas el pimentón.

-Eh……me explicas de nuevo que son las julianas….¿por favor? –sonrojada la miraba haciendo un puchero, causándole deseos de abrazarla.

-Mira- Ximena se acomodo detrás de la otra chica, paso sus brazos por debajo de los de ella, acomodándolos de tal manera que pudiera tomar el cuchillo juntas –sólo debes poner el cuchillo así….-tanta cercanía le producía cosquillas en el vientre, y eso ya la estaba preocupando.

-Esto es cómico, creo que mejor y entro a clases de cocina- la pelirroja  giro su rostro sonriendo sin darse cuenta de lo cerca que se encontraba de ella.

o.O.o

-yo…….no………-algunas imágenes se cruzaban por su cabeza, pero le costaba formar algo coherente-solo….solo recuerdo estar ayer con mi padre en una fiesta.

Flash back

-Hija en la noche tenemos una última reunión, es la fiesta del nuevo socio de la compañía- su padre acaba de llegar a casa y se encontraba en la biblioteca recogiendo algunos documentos.

-Que bueno papa, ya extraño estar en casa-“pero más que nada extraño a Ximena”-pensaba al tiempo que iba por un café para su padre, esas dos últimas semanas había tenido muy poca comunicación con la castaña, por no decir que había sido nula, si no estaba en la iglesia ocupada, eran los exámenes, y esa tal Alexandra –grrr- cada vez que la oía hablar de ella, una ola de celos la invadía sin saber la razón exacta. –preferiría mil veces que se la pasara pegada Héctor-dijo en un susurro mientras colocaba el café sobre el escritorio.

-¿Decías algo hija?-su padre la miro extrañado mientras levantaba la taza de café tomando un poco de su contenido.

-Ehhh…..no…..¿a qué hora es la fiesta?....pues para estar lista antes de que te dé por correr-lo miro sonriente, pues sabía que su padre se pondría rojo al decirle eso.

-Cof cof…….yo no sé de que hablas, yo nunca llego tarde a ningún lugar-tomo su corbata con la mano derecha y la bajo un poco pues ya le empezaba a incomodar.

-Ajam……es por eso que llegaste al último el día del matrimonio con mi mama-la pelinegra se dio la vuelta divertida, haciendo que acomodaba los libros de la estantería, pues no quería hacer sentir más mal a su padre, bueno, no más de lo que ya lo estaba haciendo sentir.

-Ya te dije que fue un accidente, esa señora se cruzo en mi camino y casi hace que me caiga de la moto –hizo que observaba de reojo unos papeles haciéndose el desentendido, pero recordando la cara de asesina de su esposa ese día, creyendo que la iba a dejar metida en el altar.

-Papá -la chica entrecerró los ojos mirándolo a la cara- era una vía peatonal, la señora tenía todo el derecho, además solo a ti se te ocurre ir en moto a tu propia boda, espero nunca hacer una cosa de esas-al imaginarse la cara de la ojiverde un escalofrió la recorrió por completo.

-Debe ser alguien especial para que te hayas quedado con esa cara de tonta-el hombre se acerco y le revolvió el cabello tiernamente.

-No…..si…..no lo sé- esos últimos días había tenido mucho tiempo para pensar, su relación con Ximena había sido complicada desde un principio, sin contar que era la novia de su mejor amigo de la que había decidido enamorarse.

-Ummmm……..papa…….tu….tu- este tipo de preguntas le incomodaban un poco y más el hablarlo con su padre, tomo aire para impulsarla a salir de su boca- ¿tu como supiste que era con mama con quien querías pasar el resto de tu vida?- en la cara de su padre se dibujo una sonrisa lo que hizo que su cara se pusiera como una bombilla.

-Ven….-el hombre salió de detrás del escritorio –salgamos un rato a caminar –salió por la puerta de la habitación quitándose la chaqueta y la corbata, para luego dejarlas en su dormitorio.

Fin flashback

o.O.o

Sólo dos centímetros la separaban de la gloria de sus labios, dos centímetros que la harían cruzar el límite, los segundos pasaban como si fueran horas, las miradas se cruzaban, el oxigeno se terminaba,  después de tantos sueños, era el momento para probar sus labios, un centímetro y la tentación se haría realidad.

La puerta de la cocina se abrió de golpe, haciendo que se alejaran al instante bastante sonrojadas.

-Huele rico……-su madre entraba con miles de paquetes a la cocina- hola hija…..-dejo los paquetes sobre el estante, para luego acercarse y darle un beso en la mejilla –hola Alex, al parecer te están enseñando a cocinar –la mujer la miro divertida, pues la última vez que había visto a esa chica en su cocina, por poco la termina incendiando.

-S..si-los acontecimientos de hace rato tenían confundida a la pelirroja, era muy claro que algo estaba ocurriendo entre Ximena y ella, algo que hacía que suspirara demás por ella, que por ratos la observara sin fijarse en cuanto tiempo se quedaba embobada, pero había otra cosa que la mantenía en zozobras, la castaña pensaba en alguien más, alguien por momentos le robaba su atención.

-Tu padre está muy contento – la  mujer sonreía mientras se acomodaba en la silla del comedor, la comida estaba lista y todas morían de hambre.

-¿Y eso porque ma´? –la ojiverde llevaba la ensalada y la colocaba en el centro de la mesa.

-El obispo central de la ciudad de New York lo ha invitado a quedarse tres meses para dirigir la iglesia mientras el toma un tratamiento –la noticia tomo por sorpresa a Ximena, su padre tenía la costumbre de llevarlas para todas las ciudades donde lo invitaran.

-Y..y eso cuando seria? –sentándose al frente de su madre hizo la pregunta lo mas sutilmente que podía.

La pelirroja la miro con curiosidad, si algo había aprendido en todo ese tiempo era a conocer a su amiga, y algo le decía que esos tres meses fuera de la ciudad la preocupaban.

-Bueno, tu padre hablo con el obispo y le explico que solo te faltan dos meses para terminar el colegio, así que el viaje quedo para una semana después de tu graduación –ella disfrutaba de su comida, si algo tenía su hija era talento para la cocina.

o.O.o

Regreso flashback

La morena caminaba con su padre por el Copley Square, sentía que tenía de nuevo 10 años, hace mucho que no compartía tiempo con el viejo, y si el viejo porque ya se le veían unas canitas saliendo de su cabello.

-Ahí cosas de las que no me enorgullezco –el hombre comenzó la conversación un poco cabizbajo – cuando conocí a tu madre yo salía con varias chicas a la vez.

(N/A: por fin me entero de donde heredo Andrea su forma de ser…XD)

-Cuando ella entró por la puerta del salón, lo primero que pensé fue en jugar con ella, se miraba tierna, inocente y hasta ingenua –nunca le había contado eso a nadie, y ahora decírselo a su hija lo ponía nervioso por lo que recogía pedacitos de hojas del suelo para los nervios se disiparan aunque fuera un poco.

-Empecé a buscar estrategias para pasar tiempo con ella, averigüe sus clases, sus horarios, sus pasatiempos…..-Andrea lo miró sorprendida, esas eran cosa que ella misma hacia para caerle a  su presa –a ella siempre le ha gustado leer, sosa que yo odiaba, me metí en su clase de lectura, el primer día de presentación la encontré sola en el estacionamiento, estaba algo triste, a convencí para que me dejara llevarla en mi moto a su casa, al llegar ella se despidió dándome un beso, y un libro que hasta hoy aun conservo –con ilusión recordó el beso de esa noche.

-¿Qué libro era?-la morena lo miro sonriente, nunca había visto a su padre con esa cara de ilusionado.

-Del amor y otros demonios, de Gabriel Gracia Márquez……dirás que es muy romanticón para alguien como yo, pero al leerlo encontré en el mucho de tu madre –cerca se veía a un anciano vendiendo helados, se acercaron para pedir uno de coco para su hija y uno de fresa para él.

-¿Y luego, qué pasó?- la ojiazul intrigada se preguntaba quien decidió comenzar la relación.

-La verdad aun lo pienso y no sé como paso todo, tanto tiempo compartía con ella que dejé de ver a las otras chicas, y de ser un vago…….hasta subí mis notas….jajajaja-el hombre se reía con ganas al tiempo que lanzaba una piedra al lago del parque.

-Y yo que creía que te habías graduado por iniciativa –cerró los ojos con decepción, ganándose un pequeño golpe en su nuca por parte del mayor –eiii- se sobo con su mano derecha.

-Sigo siendo tu padre……-un color carmín pinto las mejillas de este –en fin…..sin darme cuenta me enamoré de ella y fue complicado al principio, cuando se lo dije, muchos rumores le habían llegado, y a esas alturas no confiaba en mi, aunque me conocía como nadie –ambos se sentaron en la orilla acabando sus helados.

-Pero aún no respondes mi pregunta…….¿cómo supiste que era ella? –la tarde se hacia presente sobre ellos, el sol empezaba a esconderse.

-Su padre quería que ella se casara con un sueco idiota, el maldito era rubio y tenia cosas que yo aun estaba lejos de tener….un día la fui a ver a su casa, al llegar la vi despedirse de el con un beso……me dolió el pecho, nunca había sentido semejante dolor, ahí me di cuenta que la amaba como a nadie, espere a que el chico se fuera y luego idee un plan……un plan de conquista –una sonrisa de satisfacción se cruzo por su cara.

-La buscaba todos los días en la mañana en mi moto, le llevaba flores y dulces, todos los días leíamos algo nuevo y aprovechaba para leerle poemas que ella recibía primero con cierta aprensión, y luego con sonrisas…..hasta que un día decidí invitarla a tomar un café y hablarle de mis sentimientos……no me la puso fácil, pero cuando le robe el primer beso, sentí que era el mejor regalo para todos mis esfuerzos –ambos se colocaron en pie, se estaba acercando la hora para la fiesta –solo te diré una cosa hija – la tomo por los hombros mirándola directamente a los ojos –puedes pasarte la vida jugando con muchas chicas, pero el día que te enamores……no intentes jugar con ella, porque todo trae sus consecuencias y no siempre terminan bien –la abrazó fuertemente sabiendo que en ese momento su chiquita estaba cambiando.

La hora de la fiesta estaba cerca.

Continuará…