lunes, 5 de julio de 2010

Princesa Azul a domicilio - Capítulo 5

Hola Bauler@s!

Apenas un capítulo nos separa del final de este fanfiction, espero que sea de su agrado y comenten.

Enjoy!

Autor: KaoriD
Capítulo 5: La resurrección del ave fénix

Tres chicas estaban sentadas en una banca del campus universitario, dos pelirrojas y una morena, ésta última caminaba de un lado al otro y hablaba al mismo tiempo, mientras las otras la observaban.

-Van tres semanas y nada que aparece por la universidad, incluso he esperado fuera de su edificio por horas. Sólo he visto entrar y salir a esa amiga suya, Haruka. –Natsuki hablaba con sus amigas, se notaba realmente preocupada, estaba ojerosa como sino hubiese dormido bien en días.
-Akane me ha dicho que Shizuru no quiere saber de nadie, ninguna de sus otras amigas ha podido verla o hablarle. Como dices, Haruka es quien las mantiene informadas de su estado. De igual forma Akane no quiso decirme mucho, creo que desconfía de mí por ser amiga tuya, pero está igual de preocupada por Shizuru. Dice que ella siempre ha sido reservada con sus cosas pero nunca hasta este punto.
-Entonces tengo que hablar con Haruka, tengo que saber de Shizuru, no puedo seguir así.
-Créeme Natsuki, no creo que sea buena idea que hables con esa chica. –explicaba Nao.
-¿Y por qué no? –preguntó la morena.
-Porque tendríamos luego que ir a la morgue a reconocer tu cadáver y la idea no me hace ni pizca de gracia. Esa rubia te asesinaría nada más verte, no te daría oportunidad de abrir la boca siquiera.
-Es raro que diga esto, pero estoy de acuerdo con Nao.
-No me interesa y si me mata tal vez sería lo mejor. Tengo que verla, necesito saber de Shizuru, sin ella mi vida no tiene sentido.
-Vaya, el amor el amor. –ironizaba.
-Nao, ya deja de molestarla.

Nao y Mai estaban igual de preocupadas por su amiga (sólo que la primera lo disimulaba mejor), todo el tiempo había estado aparentando fortaleza. La verdad era que no estaba durmiendo ni comiendo bien, se saltaba las clases, faltaba al trabajo por ir a hacer guardia al edificio de la castaña, andaba distraída y triste.

Mientras las dos pelirrojas trataban de hacer entrar en razón a Natsuki, vieron un grupo numeroso de personas aproximándose bastante emocionados.

-Vaya, parece que murió algún profesor odiado –decía Nao con su acostumbrado sarcasmo.
-Lo que sea, pero ahí viene Haruka, iré a hablarle de una vez. Quizá con toda esta gente se contenga de asesinarme. –Natsuki se levantó, pero casi al instante sintió una mano en su hombro.
-No creo que sea necesario que hables con Haruka para saber de Shizuru.
-Mai, no quiero seguir discutiendo, ya les dije que hablaré con Haruka.
-No, Mai no te lo dice por eso, mira a quién siguen las masas. –dijo señalando hacia la muchedumbre.

Natsuki casi sufre un colapso al ver aparecer a Shizuru, sonriente y deslumbrante, caminando por el campus como si fuese la pasarela de algún desfile de modas. Haruka iba a su lado con cara de guardaespaldas de Britney Spears, también la acompañaban Midori y Yukino. Además, la seguían al menos treinta personas entre chicos y chicas que la saludaban y le daban la bienvenida.

La castaña les dedicaba sonrisas y tenía gestos amables, en especial con las chicas, esto incomodó a la morena que la miraba tan fijamente que empezaban a dolerle los ojos.

Detallándola, se veía un poco más delgada y algo pálida, su forma de vestir era bastante más… provocativa. Llevaba puesta una minifalda negra, un top marrón que resaltaba su busto, una chaqueta negra que hacía juego con la falda y botas de cuero con tacón de aguja. También usaba lentes oscuros, se notaba que la luz del sol le incomodaba mucho, seguramente por todo el tiempo que pasó encerrada.

Shizuru y su séquito pasaron justo enfrente de Natsuki, sin siquiera reparar en ella, fue como si ella no estuviese ahí. Esto hirió profundamente a la morena que seguía con la vista a su amada.

-Natsuki, cierra la boca o te tragarás algún pájaro. –pero la morena no reaccionaba, Nao volteó a mirar a Mai como preguntándole qué hacer.
-Ven Natsuki, ya has comprobado que, al menos de salud, está más que bien. –dijo Mai tomándola por el brazo.
-Si-si. –dejándose llevar mansamente.

Un rato después, en casa de Mai, las chicas seguían conversando.

-Natsuki, es obvio que se vistió así, te ignoró y estaba tan sonriente con sus fans para hacerte sentir mal y celosa. –habló Nao.
-Empieza a preocuparme estar de acuerdo con ella, pero tiene razón la araña, eso fue una especie de venganza.
-¿Pues saben qué? –preguntó Natsuki firmemente.
-¿Qué? –en coro y emocionadas.
-Le funcionó. –después estrellaba la frente contra la mesa y se quedó así mucho rato.

Mai y Nao no pudieron sino bajar la cabeza con una gota resbalando por sus sienes.

Si Natsuki pensaba que lo peor del mundo era que Shizuru la ignorara y ahora recibiera de buena gana a sus muchos admiradores, no había visto más que la punta del iceberg. Las semanas siguientes la castaña era vista por los pasillos de la universidad y por las calles de la ciudad, cada día con un acompañante distinto. No hacía distinción entre chicos y chicas, Akane le contaba a Mai que ahora la hija de Kyoto se dedicaba a la vida nocturna, organizando salidas y fiestas.

Esto, lejos de alegrar a sus amigas, las tenía más que preocupadas, sólo Midori parecía disfrutar del nuevo estilo de vida de la castaña. Haruka por su parte se había convertido en la sombra de su amiga, intentando siempre cuidar de ella. Esto no hacía muy feliz a Yukino que, a pesar de entender la situación y conocer de sobra los sentimientos de la rubia, no podía quedarse impasible mirando como su amiga arruinaba su vida y de paso arrastraba a Haruka y Midori con ella (aunque en el caso de esta última no hubiera mucho que salvar).

Un día que Mai, Nao y Natsuki se encontraban, como todas las tardes, en la casa de Mai fueron sorprendidas por una visita muy especial.

-Buenas tardes Mai. –habló una joven de cabello marrón.
-Buenas. –saludaba tímidamente la otra chica.
-Akane, Yukino ¿qué hacen aquí? –sorprendida.
-Mai, ¿está tu amiga Natsuki contigo?
-Si, pasen adelante.

Ambas chicas entraron y se sentaron donde les indicó la pelirroja, luego ésta llamó a Natsuki quien bajó las escaleras acompañada por Nao.

-Iré por algo de tomar. –dijo Mai, al volver con algunos refrigerios, dio inicio a la conversación.
-Le pedí a Akane que me trajera para hablar con Natsuki porque estamos muy preocupadas por nuestras amigas. Shizuru se está autodestruyendo y está arrastrando a Haruka y Midori con ella. Sabemos lo que pasó entre ustedes. –Natsuki bajó la mirada bastante apenada.
-Shizuru es más frágil de lo que parece. Desde que la conocemos mantiene a la gente a cierta distancia, incluso a nosotras sus amigas de toda la vida. –hablaba Akane. –te dejó entrar a su vida y confió en ti como nunca antes había hecho con nadie, es normal que se sintiera tan herida por tu engaño. –la morena se sintió aún peor.
-Haruka y Midori han estado cuidándola para que no cometa alguna estupidez. Bueno, al menos Haruka la cuida. –explicaba Yukino, Akane y ella suspiraron resignadas imaginando a Midori bailando ebria sobre una mesa.
-Natsuki, queremos saber si tú amas realmente a Shizuru. –los ojos de la morena respondieron por ella.
-La amo con todo mi corazón. –dijo quebrándosele la voz.
-Queremos que Natsuki y Shizuru arreglen las cosas. Ella te ama profundamente, no estaría en ese estado sino fuese así. –Natsuki levantó la mirada, esperanzada. –Con la promesa de que la tratarás bien y nunca más la lastimarás.
-Lo prometo… no, lo juro.
-Así que hemos ideado un plan. Para ello debemos unir fuerzas. –la joven se arreglaba los lentes dejando ver un brillo malicioso en su mirar.

Esa noche Shizuru había quedado con un grupo para verse en el pub de moda. Estaba con sus amigas en su apartamento para arreglarse, Midori se miraba al espejo y al otro lado de la sala, se encontraba Haruka, quien lanzaba miradas de reproche a la mayor de sus amigas. Entendía (aunque no apoyaba) la manera de actuar de Shizuru, pero le molestaba que Midori sólo se dedicase a disfrutar en lugar de intentar ayudarla.

Del cuarto salió la castaña, tenía puesto un vestido color violeta con un corte bajo en la espalda y un escote sexy pero sin ser vulgar, sandalias altas color dorado y accesorios varios. Era una dulce tentación para cualquiera, transpiraba sex appeal. Haruka presintió que sería una noche muy larga, con esa indumentaria atraería a más de un buitre.

-Oye Bubuzuke, creo que deberíamos ir a algún restaurante lindo, pasar una velada tranquila y volver temprano, recuerda que estamos entre semana y mañana tengo una prueba importante.
-Ara ara, si Haruka tiene que presentar mañana, debería estar en casa estudiando. Puedes irte, estaremos bien Midori y yo –dijo y luego mostró una de sus sonrisas prefabricadas.
Haruka volteó a ver a Midori que se estaba metiendo unos kleenex en el brasier.
-No, me quedaré acá con ustedes, no dejaré que me culpen si les pasa algo malo.
-Aaaaah, Haruka es una pesada. Vamos, tienes que soltarte un poco como lo hace Shizuru. –decía la mayor.
-Que nochecita la que me espera. –pensó la rubia, en ese momento su celular comenzó a sonar, vio en la pantalla que se trataba de Yukino. –Hola, Yukino.
-Haruka-chan, tenemos un plan para hacer que Shizuru vuelva a ser la de antes, ¿estarías dispuesta a ayudarnos? Sino puedes hablar con libertad sólo di si o no. –escuchaba la vocecita de su amiga.

Haruka lo meditó, quizá ayudar a Shizuru significaría traicionar su confianza, no estaba muy segura de hacerlo pero en ese momento habló Midori.

-¡Miren chicas! Traje una botella de sake, podremos tomar algo antes de irnos a la fiesta ¡wuju! –la miró sonriente.
-Iré por unos vasos. –respondió la castaña.
-¿Bebes Haruka? –preguntaba la mayor de sus amigas bamboleando la botella frente suyo.
-¡SI! –gritó al teléfono Haruka.
-¿Ves? ¡Ese es el espíritu Haruka! –le dijo Midori pensando que la rubia se dirigía a ella.
Dime qué debo hacer –susurró.
-Bien, tienes que llevar a Shizuru a este lugar…

Haruka memorizó la dirección y luego colgó la llamada. Por suerte, Midori y Shizuru estaban muy ocupadas brindando como para interesarse en ella.

En tanto que, las cuatro chicas dentro del auto aguardaban expectantes a que Yukino finalizara la llamada. Sobretodo Natsuki, quien era un mar de nervios.

-Perfecto, Haruka-chan accedió a ayudarnos, aunque… pensé que sería más difícil convencerla. –habló cerrando su celular aún algo extrañada.
-¿Estaba con Shizuru? –preguntó Natsuki.
-Si, escuché su voz en algún momento.
-Todas se alegraron y emprendieron el viaje. –la misma Yukino conducía.
-Natsuki, ¿ya pensaste lo que le dirás a Shizuru? –preguntó Mai.
-No, creo que en ese momento, dejaré que mi corazón le hable.
-No es que quiera asustarte, pero Shizuru estará muy enojada cuando descubra que fue llevada a ese lugar bajo engaño, no sabemos cómo pueda reaccionar, será mejor que pienses qué le dirás. –aconsejaba Akane.
-Quizá sólo deban tener sexo. –dijo la pelirroja como la cosa más normal del mundo.
-¡NAO! –gritaron todas.

Natsuki ahora estaba mucho más nerviosa, pero seguiría sus instintos, sabía que su amada estaría enojada y que quizá ni querría hablar con ella, pero confiaba que podrían arreglar las cosas o al menos lograr que Shizuru dejara de comportarse como lo estaba haciendo.


Continuará

5 comentarios:

  1. hola, gracias por darme la dosis semanal de shiznat, cada vez me gusta mas sigan asi.

    ResponderEliminar
  2. Buena forma de iniciar el día :), aunque solo quede el final de este fic T_T. Muchas gracias por publicar.

    ResponderEliminar
  3. Que tal!!!! me tienen pegada con estas historias de Shi/Nat...te felicito làstima que tengamos que esperar por el final me alegra la mañana leerte sigue asi te felicito....

    ResponderEliminar
  4. felicidades!!y gracias!

    espero el final con ansias

    ResponderEliminar
  5. muy bueno el cap!!!! pero nos dejaste con ganas de mas...T_T y ya solo queda el final!!se me hizo bastante corto... pero lo espero con ansias :)
    muchas felicidades por el fic y gracias por publicarlo!!!jiji :D
    *Mery-san*

    ResponderEliminar

Agradecemos y nos hace feliz que te animes a comentar, por favor al manifestar tu opinión recuerda hacerlo con tolerancia, recordando que no todos pensamos igual. Las críticas deben ser constructivas, siempre en un marco de respeto.

Las administradoras del blog se reservan el derecho de borrar cualquier comentario que resulte ofensivo.

Al comentar recuerda que estás mejorando tu cutis y reafirmando tus glúteos ^^