Hola Bauler@s!
Estos días, cada vez que abro mi pc, recuerdo que tengo un par de doujinshis a medio editar pero lastimosamente la semana no fue fácil. Espero tenerlos para la próxima semana, así como también el encargo que me hizo FragileDream *tocando el piso con la frente en una profunda reverencia* lo siento.
Por ahora, continuamos con el penúltimo capítulo de este fanfiction. Espero que lo disfruten y dejen sus comentarios. Les deseo tengan un lindo fin de semana.
A leer!
Estos días, cada vez que abro mi pc, recuerdo que tengo un par de doujinshis a medio editar pero lastimosamente la semana no fue fácil. Espero tenerlos para la próxima semana, así como también el encargo que me hizo FragileDream *tocando el piso con la frente en una profunda reverencia* lo siento.
Por ahora, continuamos con el penúltimo capítulo de este fanfiction. Espero que lo disfruten y dejen sus comentarios. Les deseo tengan un lindo fin de semana.
A leer!
Autor: KaoriD
Capítulo 19: Drenando.
Condujo a alta velocidad pero siendo muy cuidadosa. Shizuru iba en silencio abrazada con fuerza a su cintura, no había pronunciado palabra desde el incidente con Reito, pero era normal después de semejante experiencia. Cuando detuvo la motocicleta frente a una cancha de bateo la castaña se extrañó, pero tratándose de Natsuki ya nada podía sorprenderle.
-Es la primera vez, desde que te conozco, que pasas tanto tiempo callada –dijo tímidamente.
-Es la primera vez que siento mi corazón roto –Natsuki se sobresaltó ante esas palabras.
-Acaso tú… ¿sentías algo por él? –preguntó, mientras notaba cómo se le secaba la garganta.
-Si, pero no como piensas –Natsuki respiró de alivio. -Cuando llegué a Fuuka fue la primera persona con la que pude sentirme cómoda, siempre estuvo ahí para ayudarme, considero a Reito-san un buen amigo. Siempre noté su interés en mí, pero pensé que tenía claro que no podía corresponderle y… a estas alturas, Natsuki debería saber que sólo ella me interesa de esa forma.
¡Si! –la morena exclamó a la vez que levantaba el puño de forma triunfante.
-Ara ara, creo que le subí el ego –pensó.
-No te tortures más, no fue tu culpa, por hoy, no pensemos más en eso –dijo recuperando la compostura.
-Lo intentaré, ahora, podría Natsuki explicar ¿qué hacemos aquí?
-Eh… esto… bueno je je –la chica se rascaba la nuca –verás, se que cuando te sientes enojada o triste vas a ese mirador que me mostraste hace un tiempo. Pensé que esta vez podríamos hacerlo a mi manera -Shizuru parecía no comprender. -Te mostraré cómo, sígueme. –la otra obedeció.
Entonces, se colocaron unos cascos, cada una tomó un bate y Natsuki le explicó la posición correcta para comenzar a practicar. La chica de Kyoto aprendió rápido, pudo conectar varias veces y dar un par de buenos batazos, para orgullo de su novia.
Una hora después…