La Boda (Oneshot)

¡Hola Bauler@s!

Ha pasado mucho tiempo desde mi último post, lo siento, pero este año me puso a tomar decisiones y a priorizar las cosas. No quiere decir que haya olvidado al Baulito, paso de vez en cuando como una lectora más. Por suerte, mis chicas siguen al pie del cañón. Debo decir que de mayor me gustaría escribir tan bien como KT o Arena y qué decir del Diario de Lea, genial trabajo de Ali D.  En cuanto a Kaoru y BlackRose, nuestra benjamina inicia una nueva aventura académica y Blacky está viviendo una gran experiencia al otro lado del mundo, esperamos un día tenerlas de vuelta, sin embargo, es grato saber que les está yendo bien. Yo también espero un día retomar mis labores por estos lados.

En fin chicos, espero que disfruten de este post, cortesía de Utena93 quien, haciendo espacio en su vida como estudiante universitaria, nos regala parte de su talento. Mil gracias para ella y otras mil para ustedes por seguir del otro lado apoyando a nuestro blog. Se les quiere,

La Boda

Autora: Utena93

Es el día de mi boda y aquí estoy apretando su mano con fuerza. Muchas veces he soñado con este momento… se me hace tan raro. Hace un año imaginaba que sería ella quien me esperase en el altar y no la que me acompañase hasta él. La vida da muchas vueltas… y como buena madrina me deja al lado de mi futura esposa, se coloca frente a mí y sonríe para darme ánimos.

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Rumbo a casa. Cap 3.- Pasado y presente

Hola Bloguers os traigo la tercera entrega de Rumbo a casa, la historia de piratería, ojito que la historia se va a ir cargando de alto voltaje.
Enjoy!!

Su nombre era Celeste, tenía 31 años y era comerciante en el pequeño archipiélago de Trueque, una belleza isleña de tez blanca y pelo azabache, una muchacha que a mis ojos parecía estar rebosante de delicadeza y exquisitez, una chica cuyos increíbles ojos debieron estar llenos de dulzura, pero los cuales hoy delataban haber vivido más de una tragedia en su vida.

Celeste comenzó su relato con un tono de voz suave y tímido, sus palabras iban narrando los hechos que a veces quedaban interrumpidos por unos estremecimientos que acababan con un silencio. Mientras yo bebía unos largos tragos de Ron miel intentando así aplacar la rabia que sentía al escuchar todo aquello de sus labios.

La bella isleña solo era una simple tendera dedicada fielmente a su puesto, un día al llegar a su tenderete se encontró con dos oficiales registraron a fondo su cabaña, al ser descubiertas le exigieron que se les pagara un porcentaje por los productos vendidos, como ella se negó le pegaron una paliza y retiraron su protección sobre la isla haciendo que cayera facilmete en manos de las piratas, quienes arrasaron todo lo que encontraron y la convirtieron en una rehén más.

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El Diario de Lea - Nro19

Buenas noches Yuri fans. Lamento que este capítulo haya tardado tanto (de verdad) pero he estado algo ocupada con mi vida 1.0 (de todo me pasa ¡Ay! ¡Ay! como sufro)

Pero sin más preámbulo les traigo el cap 19, creo que será divertido para quiénes siguen la tira, ustedes saben jajaja.

Espero sus comentarios :)

Por cierto, el cap es para mayorcitos. Si te vas a dormir con la canción del Doctor Conejo de Colgate, pues no, no deberías verlo, pero como sé que ni me harán caso... Igual yo lo pongo porque es mi obligación hacer la advertencia.

Ya saben, click para ver las imágenes más grandes

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Rumbo a casa. Cap 2 Rescate en alta mar

Hola yuri fans, hoy toca el segundo capitulo que he rescatado de la historia de piratas que os presenté la semana pasada, espero que os guste para que pueda seguir publicándola.
Ahora preparaos, tod@s a vuestros puestos, remad, remad ¡todo a estribor! y sobretodo:

Enjoy!!!

 

Rescate en alta mar

  

Llevaba tan sólo unos días descansando en mi villa cuando mi tía la Señora de Chevalier, me mandó llamar para llevar a cabo una nueva misión en alta mar.

Al parecer esas sucias piratas habían asaltado una pequeña isla, robado las mercancías y secuestrado a algunas isleñas, probablemente para venderlas como esclavas en el mercado negro. Mi tía tenía muchos intereses económicos en aquella zona que se habían visto afectado por el ataque, por lo que yo en mi condición de oficial de la marina me veía en la obligación de investigar y detener a las responsables.

 Mi costumbre cuando parto a alguna misión es la de no usar el uniforme de la marina; la lucha contra piratas requería de técnicas piratas, por lo que me puse un ceñido pantalón negro, abroché mis botas altas hasta la rodilla, elegí un corsé de cuero, también negro  y una capa verde menta para cubrir mis hombros. Para ésta ocasión llevaba parte del pelo recogido con pequeñas trenzas color trigo a modo de adorno, cogí mis espadas, una pistola y el camafeo que usaba como colgante y que ocultaba un potente veneno para el caso en que fracasase en mi misión. (…)

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