Me permito robarme un rato el Baúl (abusando de la confianza con mis compañeras) para escribir este post :) Espero les guste.
Sábado 28
de junio Lima, Perú.
Desperté
temprano de muy buen ánimo, el cual sin duda contrastaba con el cielo Limeño,
un gris opaco y grueso. “Es tan diferente del cielo arequipeño” siempre me
digo, pues la verdad es que ambas ciudades tienen climas muy diferentes, si
cabe, diametralmente opuestos, a pesar de ello, me gusta visitar Lima, por sus
luces, por mi familia, por mis amigos, por la mentalidad de la gente
(seguramente, no toda, pero bueno…)
Planifiqué mi más reciente viaje a la ciudad capital peruana por dos importantes motivos:
El cumpleaños de mi padre (con el cual no vivo) y la Marcha por el día del Orgullo, marcha a la cual quería asistir desde hace un buen de años, pero mis visitas nunca coincidían.
Planifiqué mi más reciente viaje a la ciudad capital peruana por dos importantes motivos:
El cumpleaños de mi padre (con el cual no vivo) y la Marcha por el día del Orgullo, marcha a la cual quería asistir desde hace un buen de años, pero mis visitas nunca coincidían.
No mentiré,
sentía emoción. No, no, no una emoción exacerbada y exagerada de saltar y
caminar por las paredes, de contar horas, de sudar entre un ligero pánico y
alegría irrefrenables (eso me pasará cuando conozca a Jennifer Lawrence… porque
ustedes saben, LA VOY A CONOCER!!!!), simplemente una emoción interna, una
chispita pícara y juguetona de alegría, un “vamos, será divertido ir al menos
un rato”.
Yo sabía y sé que esto no es el Gay Pride de San Francisco, de Madrid o de Barcelona, sabía y sé que no iban a ser 250 000 las personas asistentes, pero con un puñado de nosotros y con el plus de la coyuntura política que hay sobre el tema gay actualmente, pues sí que iba a ser interesante.
Yo sabía y sé que esto no es el Gay Pride de San Francisco, de Madrid o de Barcelona, sabía y sé que no iban a ser 250 000 las personas asistentes, pero con un puñado de nosotros y con el plus de la coyuntura política que hay sobre el tema gay actualmente, pues sí que iba a ser interesante.
También sé
que no toda la comunidad LGBT aprecia este tipo de despliegues “escandalosos”.
De hecho, tengo un amigo que simplemente no quiso acompañarme por ser una fiesta
“patronal” (fiesta designada a algún santo patrón de una población, de un
barrio, etc. El término se puede usar de manera despectiva refiriéndose a una
fiesta de las personas de bajo nivel socioeconómico… Sí, mi amigo es muy diva)
y argulló que las actitudes de muchos de sus asistentes hacía que las sociedad
que de por sí ya nos odia, nos odie aún más.
Si uno se pone a pensar cabe que hasta cierto punto PUEDA tener razón, pueda, claro, porque yo no lo creo así, pero claro, no soy dueña de la verdad.
De hecho, yo en mis primeros años fuera del armario, era defensora de la idea de que todos los gays debíamos ser gays “decentes” y “normales” para ser aceptados, sin darme cuenta que esta idea es un total y completo atropello a la individualidad de cada persona.
Si uno se pone a pensar cabe que hasta cierto punto PUEDA tener razón, pueda, claro, porque yo no lo creo así, pero claro, no soy dueña de la verdad.
De hecho, yo en mis primeros años fuera del armario, era defensora de la idea de que todos los gays debíamos ser gays “decentes” y “normales” para ser aceptados, sin darme cuenta que esta idea es un total y completo atropello a la individualidad de cada persona.
Ahora creo que las actitudes escandalosas de algunos (si cabe aquí la palabra escándalo) son solo una excusa para aquellos que les guste seguir revolcándose en su ignorancia, simplemente por ser una excusa fácil de la cual agarrarse. Es como culpar a una mujer víctima de una violación por que iba vestida con mini y proteger a otra porque iba con pantalón, básicamente “Los ‘gays respetables’ que se comporten ‘normal’ (o sea, como heteros) son mejores que aquellos que son amanerados”. Pero bueno, no quiero enredarme mucho en un solo tema, no quiero que el post quede kilométrico y que sea pesado de leer, aunque tampoco quiero que se me pase nada sobre los puntos que quiero tocar.
La Marcha.
Otro
amigo mío (al cual logré convencer de que me acompañara aunque sea media hora)
me recogió y fuimos a la concentración previa a la salida de la Marcha.Imagínenme, yo sintiéndome el ser más gay del universo entrando a la concentración y al verlo todo tan colorido pensar “estoy muy pálida, estoy muy hetero”. Así que empecé a buscar con los ojos a las personas que repartían y/o vendían souvenirs, algo que me hiciera ver como una marica saludable. Sin embargo lo primero que mis ojos encontraron fue un grupo de personas que cantaban en coro alabanzas a Dios y dos curas ataviados de túnicas blancas y estolas de colores. Estaban realizando un pequeño servicio para bendecir el evento. Me dio emoción ver aquella escena que ciertamente podría resultar surrealista para muchos de nosotros. Eran los miembros de CCEI “El Camino” (Comunidad Cristiana Ecuménica Inclusiva).
Grupo CCEI El Camino, cantando
Sinceramente, fue para mí, independientemente de mi credo (o la, a veces, falta de él) muy bonito que lo primero que mis ojos vieran, fuera esa escena.Aquí una segunda foto (no fue tomada por mí, la saqué de Travel for Paz, pueden ver más fotos de la Marcha pinchando el anterior enlace).
T* (Foto de Travel for Paz) Los curas de CCEI El Camino y sus coloridas estolas.
Desenfundé mi cámara fotográfica, mi terca “amiga” (no es muy userfriendly y ni siquiera es profesional) y me dispuse a tomar muchas fotos que trataran de captar todo el color del desfile, de los asistentes, de los carros, de las banderolas… todo, mientras me movía y corría por todo el lugar con mi amigo a cuestas.
Nada lo representa mejor que un corazón
Nos repartieron banderitas coloridas para ataviarnos apropiadamente para la ocasión (muchos las colocaban en sus bolsos, en su cabello o tenían muchas en sus manos). Yo tomé dos pequeñas banderas de papel, me puse mis dos pulseras arcoíris y me até al cuello cual capa, una bandera más grande de tela, la cual tuve que recolocar en mi morral porque simplemente entre el atado de la bandera y la correa de la cámara fotográfica iba a morir asfixiada. Mi amigo se tuvo que ir (cuestiones familiares) así que luego de prometerle 40 veces que nada me pasaría, me quedé ahí, paradita entre el gentío, tomando fotos de los alrededores, del final de los preparativos y paseándome entre los carros alegóricos. Viendo a algunos conocidos del medio y celebridades. Captando la llegada del congresista Carlos Bruce (autor y principal propulsor de la ley por la Unión Civil, que salió del armario hace un mes más o menos) y muchas cosas. Finalmente, es hora de partir.
Carro alegórico de Discoteca "Valetodo Downtown" La discoteca (gay) más popular de Lima
Congresista Carlos Bruce llegando a la concentración.
Un parroquiano posa con Dragqueens de Lola's bar.
No tengo idea de cuantas personas había, pero yo entre la gente, sentía que éramos muchos y que hacíamos mucha bulla. Ni bien salimos, me llamó la atención un chico que nos gritaba, Biblia en mano, gritaba, gritaba mucho, pero las porras y los vivas generales del público a la partida de los carros alegóricos ahogaron sus gritos y no llegué a escuchar lo que decía.
Tengo entendido que habían más de estos chicos repartidos por toda la salida de la Marcha. Creo que eran tres.
Para el pesar de muchos homofóbicos, muchas familias presentes habían ido con sus niños. Le agradezco al Señor Saavedra por permitirme tomar esta bella foto de él y su hijo al salir la Marcha.
Gracias Señor Saavedra
El tránsito en algunos puntos de la Marcha tuvo que ser aguantado, mientras las estridentes bocinas intentaban superar la música de los carros y los coros de la gente. Luego ya todo se me movió y entre ir saltando y trotando y sacudiendo mis banderas, las fotos no salieron del todo claras.
Nos mandan un besito :)
Asesores legales
Diabla... o Maléfica de rojo
De cerca
Vistiendo el arcoiris
El gentío. Siempre tratan de minimizarnos y decir que somos 20 gatos saliendo a las Marchas, obviamente, no es así.
Caminando, paso a pasito
Coco Marusix (rubia sentada la adoro) y Monique Pardo (pelirroja). Una de las primeras Drags reconocidas en el Perú y celebridad local.
Frenando los bocinazos con el corazón (soy una cursi)
Desde mi perspectiva...
Carroza de Lola's bar tirada por un caballo peruano de paso. Un chico envía saludos al Baúl a la cámara (Si vuelvo a ir, me pondré un polo que diga: Baúl del Yuri presente o algo así)
Nebulah, dragqueen de Valetodo Downtown
Muchas gente se detuvo a mirar la marcha, muchos con cara de incredulidad, asombro. Otros con cara de disgusto. Fue en esta parte donde sentí que mucha gente odia por odiar. Recuerdo claramente a muchos que nos insultaban desde 'enfermos', 'maricas de mierda' hasta desearnos la muerte, por supuesto. Sabía que eso no iba a faltar.
¡Miren! ¡balones! XDD
Desde el balcón
La mujer manos de Vulva (y zas a todo el mundo. Yo estoy muy orgullosa de esta foto)
Las novias de la Marcha
Entrada al escenario en Plaza San Martín
¡Basta de homofobia! ¡Basta de odio!
Maléfica también fue...
Osos ¡presente!
Congresista Carlos Bruce
¡Fuerza!
Mi batería murió en esta parte, pero en Travel for Paz pueden ver más fotos (mejores también) de lo que fue el espectáculo de la tarde.
No me queda más que decir que pasé un buen momento al recorrer las calles de Lima junto con la XIII Marcha del Orgullo LGBTI y sentirme muy contenta y libre por ello además de poder apreciar las distintas partes de la Marcha (no solo carrozas y demás).
No me queda más que decir que pasé un buen momento al recorrer las calles de Lima junto con la XIII Marcha del Orgullo LGBTI y sentirme muy contenta y libre por ello además de poder apreciar las distintas partes de la Marcha (no solo carrozas y demás).
Creo que lo importante de esto es la libertad de expresarse. Yo no siento necesidad de gritarle al mundo que soy gay, se lo digo a quienes me interesa y punto, pero si la gente lo quiere, tiene derecho hacerlo, sobre todo si las iglesias cristianas tienen derecho a poner esas horribles vallas homofóbicas (indignación) que tienen en la vía panamericana de Lima.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarHey muy bien por la marcha pequeña. Entrete y bueno el post. Me sorprendió bastante la actitud de esos curas, bien por ellos
ResponderEliminarSaludos ! fuerza fuerza LGBTI!
Tiene pinta de haber sido un dia muy interesante, a ver si el año que viene no me pilla de vacaciones y voy a mi primera marcha (tengo 16 años y soy una chica bi de Madrid). Me gustó mucho tu post, y también el de Mars no kiss (soy fan de Maka Maka), soy otra yuri fan que se suma a tu página, ;p
ResponderEliminarMuchas gracias por escribirnos. Nos hace felices a todas las webmistress que cada vez más gente se sume a esta gran familia baulera. Bienvenida :)
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